jueves, 7 de octubre de 2010

TENGO UNA BICI "ERGO" SOY HOLANDÉS

Eso es lo que me dijeron al llegar hoy a las clases en Heemskerk. Llegué con la bici nuevecita (es un poco problemático porque te la pueden robar) y cuando algunas madres me vieron fue lo primero que comentaron antes de saludar: "ya eres holandés".

Comprar aquí una bici es peor que ir a Ikea: no sabes qué escoger porque no tiene NADA que ver con lo que conocemos de España. En una entrada anterior os dije que Holanda es bicicletas y tulipanes. Yo creo que sólo lo primero. La cultura de las dos ruedas está tan mimetizada con la vida holandesa que si desaparecieran creo que el país desaparecería. Y el mercado de bicicletas, lógicamente, es inmenso. No sé si alguna empresa cotizará en bolsa, pero no me extrañaría.

El caso es que hoy compré una bicicleta. Buscaba una de segunda mano, alguna vi pero las características no me convencían para el precio que me pedían (200 euros). En Beverwijk yo creo que hay más tiendas de bicicletas que bares. El caso es que tenía echado el ojo a una tienda, por su oferta. Y allí me fui. En mi inglés de 2ª (o 3ª división) logré entenderme con el vendedor. Le pregunté ciertas características (que ya me había orientado Jose) y no encontraba algo que me convenciera. Al final me ofreció una que la vi "xeitosa", tenía un descuento, dos años de garantía, un bonito color, tres marchas... No es la clásica bicicleta holandesa que frena hacia atrás, es como las nuestras. Compré también las alforjas y un chaleco reflectante para la noche, por si acaso. Aquí es obligatoria la luz delantera y trasera. en fin, precio total 445 euros y dos años de garantía, con la primera revisión de mantenimiento GRATIS en diciembre. Hasta me ofreció un seguro que en principio rechacé, pero estoy valorando cogerlo porque en los parkings públicos hay muchos robos, a pesar de que todas vienen con un cerrojo, o comprar una buena cadena para que no roben ni tan siquiera una rueda. Como véis, todo un mundo, un buen negocio y sostenible.

Y con ella me fui y como me dijo el vendedor "enjoy your bike" (en holandés se dice "fiets"), me estrechó la mano y me puse a andar. Y tengo que controlar el tema de las normas de tráfico, las preferencias, los carriles, los semáforos. Esto sí que será la verdadera adaptación, lo tengo clarísimo. Por la tarde ya dejé de ir en el bus 73 de "Conexxion" y me fui a dar clase en bici, con las alforjas llenas de fotocopias, carpetas...

Aquí tenéis la joya, el que venga la probará y ya le digo que no le será fácil. Por cierto, esta es una bici de hombre porque lleva esa barra horizontal entre el sillín y el manillar, si estuviese en oblicuo y hacia abajo sería de mujer. ¡Ah! Y si os fijáis me véis a mi reflejado en la ventana de mi habitación.



Que sea para bien, tengo la misma sensación que comprando un coche nuevo.

Un besazo a tod@s




4 comentarios:

  1. FELICIDADES!!!! Pola bici e por seres xa nerlandés, que che dure! Merca tamén un chuvasqueiro senón haste mollar, aqui xa comezou a chover, e con moitas ganas! A ver se da escampado para cando veñas a Ordes. Unha aperta, Paula.

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  2. Estarás contento coa bici?É moi chula e encima
    fas deporte.Alégrome de que todo che siga indo
    ben.Espero que ahí faga mellor temppo que aquí
    porque levamos varios días que chove moito.
    Que todo siga ben e.Xa che queda menos para vir
    para coruña.seguro que a túa familia o está desexando.Un abrazo

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  3. bueno bueno..Alfonso, esta te la van a robar fijo.
    .tendrías que haberte pillado una de segunda mano..más enxebre.

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  4. Aléjrome que xa vaias sobre rodas, agora a disfrutala pero de Holandés nada ti cidadán do mundo pero sen esquecer a túa terra galega
    Bicos

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