sábado, 31 de mayo de 2014

¡¡¡FORZA DEPOR!!!

Hoy es un día especial en A Coruña. Luce un sol primaveral, hay una temperatura más que agradable y disfrutaremos en pocas horas de un hecho histórico... o eso pensamos todos. Ya sé que todas las ciudades vibran con su equipo de fútbol local, pero si hay una ciudad que tiene una identificación al 100 % con su equipo esa es, sin duda, A Coruña.

No es que sea yo muy futbolero, nunca lo fui y supongo que esto tendrá que ver con la característica de mi personalidad de ir un poco contracorriente, separado del "rebaño". Supongo que influye también el hecho de que nunca destaqué en el tema deportivo porque tampoco me interesó, pero siendo coruñés días como hoy estás contagiado del entusiasmo y la ilusión que se respira en cada calle de esta ciudad. Cientos de ventanas con la bandera blaquiazul, los autobuses con bufandas en su parabrisas con la leyenda "Forza Depor", la gente vestida con las camisetas deportistas, la fuente de Cuatro Caminos (nuestra fuente de celebraciones) preparada para el acontecimientos, los comercios y tiendas con globos azules y blancos, banderas y todo tipo de artículos de merchandising para apoyar esa ilusión y reflejar esa unión de todos los deportistas, en fin, de todos los coruñeses.

Hoy no hay distinción de clases en Coruña, desde el potentado empresario de la zona "VIP" de la ciudad hasta el más humilde obrero de un barrio periférico; el abuelo de 80 años, con los niños de 3, la vendedora de pescado de cualquier mercado municipal (en especial las de la Plaza de Lugo), el policía, la frutera, el dependiente de Zara, los empleados de los grandes almacenes, médicos de los hospitales, todos, todos, hoy tenemos dos palabras que resumen muy bien lo que es sentirse coruñés: FORZA DEPOR.

El Deportivo de A Coruña, nuestro centenario equipo de fútbol, está a solo un punto de ascender a 1ª División. Le basta con empatar hoy en Riazor para celebrarlo y nadie duda de que se conseguirá, aunque disgustos parecidos ya hemos tenido en los últimos años. Nadie olvidará aquel fatídico penalti de Djukic en el último minuto del último partido de la Liga que nos dejó sin ganarla hace ya 20 años, pero hubo Copa del Rey al año siguiente y liga en el 2000. A Coruña vibró como nunca y la ciudad se unió para festejarlo.

No se entiende A Coruña sin el Depor, solo los que somos de aquí y lo hemos "mamado" como se suele decir, podemos explicar los sentimientos que provoca esa conjunción entre la ciudad y su equipo. Da igual que esté en 1ª División o en 2ª, siempre existirá ese matrimonio inquebrantable entre las dos realidades, haciendo que una no se pueda entender sin la otra. Entiendo que muchos lectores me diréis lo mismo con respecto a vuestra ciudad y vuestro equipo, pero esa simbiosis entre Deportivo y A Coruña es digna de estudio. Hay otros factores que fortalecen esa unión, cuestiones antropológicas que no voy a detallar aquí porque ni soy un erudito ni muchos me creerían, pero solo viviendo en esta ciudad uno se da cuenta perfectamente porque hasta se respira. Los coruñeses que me lean sabrán que A Coruña puede ser definida en muchas palabras, pero Depor, Estrella Galicia, Monte Alto, Cantones, María Pita, Hércules y vocabulario específico como "pasantía", "plas", "garimba" junto con otras expresiones que forman parte de esa jerga propia que no va más allá de Puente Pasaje (nuestro peculiar "koruño", con "k"), es nuestra razón de ser. Si algo me ha dicho cuando regresé de Holanda que ya estaba en casa sin duda fue oír por la calle ese deje al hablar cuando escuchas un "buaaaahhh, neno", único e irrepetible, aparte de ser totalmente imposible de hacer perfectamente a otro ciudadano gallego o español. 

Pues nada, a partir de las 19:00 h sabremos que pasa con este día histórico. No nos merecemos sufrir, merecemos ya llegar a 1ª División por la puerta grande y una vez allí no bajar la guardia. Todos en el Depor saben que afición como la de aquí no existe en ningún lado, incansables al desánimo y siempre apoyando, así que yo hoy también estaré orgulloso de ser coruñés porque nuestro equipo volverá a Primera... aunque sea poco futbolero. ¡¡¡FORZA DEPOR!!!


lunes, 26 de mayo de 2014

UNOS PUEDEN Y OTROS LO INTENTAMOS

Acabamos de vivir una jornada electoral a nivel europeo. En España, los resultados han tenido alguna sorpresa y los primeros comentarios en las tertulias televisivas destacan dos titulares: el fin del bipartidismo y la irrupción de partidos que han atraído votantes desencantados de la situación de crisis actual. Cuando hablo de crisis no hablo de crisis económica, sino de crisis moral, de valores, del hartazgo de los políticos de toda la vida. 

Durante el día de hoy he estado de interventor del partido político en el que milito en una mesa electoral en mi barrio. No me da miedo decirlo ni agachar la cabeza por ello, soy militante del PSOE desde hace unos años por muchas razones, incluso de historia familiar. Tampoco voy a empezar este "post" como si aquí no hubiese pasado nada, está claro que mi partido no ha obtenido buenos resultados a nivel global, pero sí empezamos a ver la luz a nivel local. En mi mesa electoral había 1004 electores. Se llegó a la cifra de 458 votantes, lo cual no es nada despreciable para unas elecciones europeas. Había otras mesas en el colegio electoral, mucho interventor del PP, alguno del BNG y representantes políticos de dos candidaturas nuevas: VOX y PODEMOS.

La cordialidad, el sacar adelante un trabajo de 13 horas sin que hubiese contratiempos, fue algo a destacar. Buena relación entre todos, miembros de las mesas e interventores. Como el día dio para charlar en momentos de pocos votantes, yo estuve hablando un rato con los de las dos nuevas candidaturas reseñadas. El representante de VOX se mostró distante, un tanto esquivo y sin dar muchas explicaciones; sin embargo, el representante de PODEMOS me explicó quienes eran, que objetivos e ilusiones tenían y tuvimos una relación bastante más fluída que con el primero. Interventores del PP, del BNG, del PSOE, colaborábamos en un trabajo de ayuda a los miembros de las mesas y facilitándonos la tarea entre todos, lo que no deja de demostrar que, en las distancias cortas, la normalidad democrática entre los dos grandes partidos y la ciudadanía de a pie tiene mucho que decir a los cargos de las ejecutivas regionales o nacionales.

Me llamó la atención una cosa a medida que iba avanzando la tarde: el número de electores jóvenes que llegaban a votar era más habitual de lo normal. Pandillas de veinteañeros se acercaban juntos a votar, alguno incluso lesionado y en muletas, lo cual me hizo reafirmarme en el hecho de que la juventud de nuestro país está concienciada y preparada. Lógicamente e históricamente, la afluencia de este sector de la población te da esperanzas, ya que la otra cara de la moneda es cuando ves que llegan ancianos que casi no pueden ni andar, ayudados de sus familiares y con el voto más que condicionado. 

A las 8 comienza el escrutinio. Y ya en las primeras papeletas nos damos cuenta de que algo está surgiendo y que tiene visos de llegar muy alto. En paralelo a las dos candidaturas del bipartidismo aparece una nueva formación que casi les alcanza, una formación de izquierdas y que su programa ha calado en la juventud universitaria de España: PODEMOS llega a ser la tercera fuerza política en mi mesa electoral siendo la gran sorpresa de la jornada y la revolución en todos los informativos. Mi consuelo: el PSOE ganó en mi mesa electoral con 20 votos más que PODEMOS y 9 más que el PP. Salí satisfecho del trabajo hecho y de mis ideas políticas, que seguro coinciden también con muchas de la nueva formación.

A lo largo de la noche vamos viendo los resultados obtenidos en toda España: datos malos para el PSOE y el PP y más que óptimos para las candidaturas que ya tenemos que dejar de llamar "minoritarias" porque se han plantado en Estrasburgo. Lo que sí queda claro es que España lleva a Europa un mensaje de IZQUIERDAS, dejando atrás incluso nacionalismos extremos excepto en Cataluña, donde los partidarios de la independencia son los claros ganadores. 

La conclusión, aún sin analizar los datos a fondo, es que gana la ciudadanía, gana el descontento de la gente de a pie y el bofetón y el tirón de orejas a la "casta" política está claro: hay que buscar otras vías para legislar, para gobernar y para mantener el estado de bienestar. Los ricos tendrán que ser ya menos ricos y los pobres empezar a poder salir adelante, recuperando las libertades y los derechos que nos han quitado los gobiernos de derechas. Me alegro por ese soplo de aire fresco que supone el avance de PODEMOS y porque la voz de España en Europa no será sólo la de la derecha rancia. La contrapartida la vemos en países que consideramos el referente, como Francia, donde la ultraderecha es el partido vencedor. A uno que ha vivido en Holanda y ha reflexionado sobre lo que hay por ahí arriba, no deja de sorprenderme al mismo tiempo que me espanta, lo cual demuestra y certifica que las mentes pensantes están en el Sur de nuestro continente y no en esa utopía que nos quieren hacer creer que son los estados del Norte. Grecia ha dado otro ejemplo de giro a la izquierda con la victoria de SYRIZA, así que espero que Merkel y sus acólitos saquen sus cuadernos de notas y empiecen a escuchar a los ciudadanos. A lo mejor es que resulta que esa solidaridad europea, ese "paneuropeísmo" nos lo han querido vender como si fuera el no va más y en Alemania, Holanda, Austria o Dinamarca lo que quieren es "colonizar" el sur. Pues acaban de toparse con un "NO PASARÁN".

Mientras, en nuestra coqueta agrupación local socialista, nos vamos conformando con ganar en un distrito, en un barrio y en remontar, pasito a pasito de aquí al futuro. Claro que se hará una lectura crítica de los resultados a nivel nacional, pero no se construye una victoria de golpe y porrazo. Hemos tocado fondo ya hace unos años aquí, en A Coruña, pero ya vemos luz al final del túnel y gracias, precisamente, a la labor de los que estamos (yo menos de lo que me gustaría) a pie de calle o a pie de urna.

Enhorabuena a los vencedores, consuelo a los vencidos, pero ilusión, mucha ilusión por seguir adelante y por mejorar nuestra Europa empezando en la mesa electoral de mi barrio. A fin de cuentas, Europa siempre será de sus ciudadanos, que somos los que le damos vida y no de los que ni siquiera saben dónde situar Eslovaquia (por ejemplo) y están ocupando un puesto en el Parlamento Europeo. Mira, al final a algunos de los que ocupan esos puestos no les vendría mal, por ejemplo (lo digo con cierta ironía) disfrutar como yo de mi querida Eurovisión, por algo se empieza a ser europeo.



viernes, 9 de mayo de 2014

EUROVISIÓN 2014

Como todos los años cuando llega mayo, regresa Eurovisión y como sabéis, uno que sigue el Festival desde que era niño, no puede dejar de hacer su reseña. El año pasado lo disfruté en directo en Malmö y en 2011 en Düsseldorf, con nuestra querida Lucía Pérez representando a España. Este año el Festival se celebra en Copenhague y tanto el pasado martes como ayer jueves tuvieron lugar las dos semifinales previas a la gran final de mañana sábado 10.

Toca seguirlo desde casa, no está la economía para coger vuelos, pagar hotel y vivir unos cuantos días en Dinamarca, además ya el año pasado me alojé en la capital danesa y crucé a Malmö por el impresionante puente de Oresünd para asistir a la gala final. Sé que hay muchos detractores del Festival, que dicen que las canciones son de muy baja calidad, pero después de casi 60 años de historia aseguro y confirmo que, entre muchas que son olvidables, hay verdaderas joyas y artistas de una calidad excepcional.

Este año también, por supuesto, y uno que tiene ciertos gustos musicales va a hacer su selección. 37 países participan entre las dos semifinales y la final del sábado, de los cuales ya se han eliminado 11, dejando para la final a 26. De los eliminados destacaría cuatro que podrían estar en la final por sus propios méritos, pero tanto los jurados profesionales como el televoto los han dejado fuera: Bélgica, Estonia, Portugal (que la queremos por afinidad) e Israel, con Mei Finegold,  a mi modo de ver injustamente relegada.

En la final encontraremos de todo: canciones que olvidaremos el mismo domingo, otras con mucho ritmo, baladas, rock, pop y algunas que para mi gusto dejarán huella no sólo entre los "eurofans" sino a más personas. Las puestas en escena, efectos visuales y demás circos pueden empujar un poco a una canción hacia los puestos altos; asimismo los tan hablados "politiqueos" entre bloques de países también pueden subir uno o dos puestos la clasificación de un país, pero está más que demostrado que un país gana porque lo votan la mayoría de los países participantes, al margen de que los medios de comunicación se empeñen en decirnos que todo está amañado, que es injusto y que habría que cambiar el sistema de puntuación. El caso es que, desde el año 2001, no se ha repetido ningún país ganador y los ha habido tanto del Norte como del Sur, del Este como del Oeste: Estonia, Letonia, Turquía, Ucrania, Grecia, Finlandia, Serbia, Rusia, Noruega, Alemania, Azerbaiyán, Suecia y Dinamarca.

El hecho de haber una puntuación determinada al 50% por un jurado profesional y por el televoto, hace que este segmento el voto de los inmigrantes sorprenda a las puntuaciones otorgadas por cada país. En los últimos años los países del Este (incluídos los del Cáucaso) obtienen altas calificaciones de jurados como los de Francia, Bélgica, Países Bajos o Alemania. Es normal, dada la cantidad de población inmigrante de esos países que viven allí. Hasta hace bien poco, España daba sus puntuaciones más altas a Rumanía, lo que explica el argumento anterior por pura lógica. Además, los países más recientes en Eurovisión hacen lo indecible para gustar en Europa de cara a su conocimiento e integración en nuestro entorno económico, como fue el caso de la victoria de Azerbaiyán en 2011. Además, en cada país las afinidades culturales y musicales son más que evidentes y cada año asistimos al intercambio de votos entre diversas regiones de Europa: los países nórdicos, los bálticos, los que conforman la ex-Yugoslavia, los de la antigua URSS, Reino Unido e Irlanda, Portugal y España, Grecia y Chipre, Suiza y Austria o Bélgica y Holanda. Por lo que ver el Festival también es un pequeño repaso a la situación política europea del año en cuestión.

Pero paso a la música, que en definitiva es lo que importa. A pesar de que hoy las tres galas constituyen un espectáculo televisivo de primer orden, lo bonito de seguir el Festival es descubrir nuevos intérpretes de calidad, emocionarte con una melodía o canción de cualquier país y, en definitiva, entretenerte. Podría deciros nombres de artistas completamente desconocidos en España que hacen una música espectacular, mayoritariamente en su idioma y que transmiten algo. No se trata de ponerme en plan enciclopedia eurovisiva, pero sí desde luego confirmar que el festival forma parte de mi vida y de cómo soy, integrado en mi día a día y que a mí, personalmente, me aporta mucho.

Bueno, venga, vamos ya a 2014. Como os decía, 26 países veremos en la gala del sábado y entre los favoritos (míos y del público en general) se encuentran: Armenia, Suecia, Países Bajos, Reino Unido, Austria, Rumanía, Hungría, España e Italia. Que gane un país distinto de estos sería una auténtica sorpresa, aunque esta edición es una de las más abiertas de los últimos años. Los expertos y las apuestas dan como ganadora desde hace semanas nada más y nada menos que a ARMENIA, con una canción que va "in crescendo" y que mezcla componentes electrónicos en una balada clásica. Su cantante, llamado Aram MP3, así como la delegación del país caucásico tienen ganas de llevarse por primera vez el premio y hay muchos factores que pueden hacerlo posible. A mí personalmente no me gusta nada la canción, pero los datos están ahí y tal vez en 2015 haya que ir a Yerevan (es la capital de Armenia, para aquellos que no lo tengan muy claro).

Se dice también que, debido a que el año que viene se llega a la 60ª edición, tendría que ganar un país que tenga suficiente capacidad económica, hotelera y con buenas infraestructuras para celebrarlo. Con esas características, estaríamos hablando de Suecia, Reino Unido, Austria, Países Bajos y en menor medida, España e Italia. De estos seis yo destacaría la canción de los segundos lectores de mi blog por número de visitas, es decir, Países Bajos. Es un dúo mixto con una canción muy intimista y que recuerda en muchos aspectos a alguna melodía de Police. Os dejo el vídeo porque esta SÍ que me gusta mucho.


Sería genial volver a Amsterdam en 2015 para ver Eurovisión, por lo menos no me perdería por la ciudad!! Y espero que alguien me aloje porque los precios de los alquileres subirán un montón!!!

En cuanto a ESPAÑA también tiene muchas papeletas para ganar, aunque siendo objetivos lo veo más difícil. Nuestra representante, Ruth Lorenzo, canta muy bien, lleva una canción con la mitad de la letra en inglés, es conocida en países como Reino Unido ya que participó allí en "Factor X" y tiene presencia en el escenario. La puesta en escena en los ensayos es efectista ya que simula la lluvia sobre la que está inspirada la canción, "Dancing in the rain". Ya veremos a ver qué pasa, desde luego la expectación este año es mayor que en 2013 y similar a la que hubo con Pastora Soler o el famoso año de Rosa de Operación Triunfo.

Suecia siempre es candidata a obtener un buen resultado por el interés que ponen en representar bien al país. Las galas internas para escoger a su representante en Eurovisión, el famoso "Melodifestivalen", son los programas más vistos en el país de Ikea en todo el año, alcanzando su final el 80% de share. Sus más preciados artistas desean estar en esa final y no olvidemos que a Suecia le debemos el mayor éxito eurovisivo de la historia: ABBA y su "Waterloo". Sanna Nielssen y su "Undo" van a quedar bien, pero dudo que volvamos a cruzar el puente de Oresünd.

Austria puede dar la campanada después de 48 años gracias a la llamada "mujer barbuda", Conchita Wurst. Este transexual con barba, con buena voz y una puesta en escena da película de James Bond, atrae muchos votos especialmente de la comunidad gay, tan integrada en el Festival, y puede que Viena u otra ciudad austríaca acojan el festival en 2015.

A mí también me gusta mucho la canción de Italia, íntegra en italiano y con la ganadora de San Remo, Emma Marrone. Italia siempre fue muy menospreciada en la historia de Eurovisión, pero grandes figuras conocidas en España pasaron por el certamen: Domenico Modugno y el ya internacional "Volare", Nicola de Bari, Massimo Ranieri, Al-Bano y Romina Power, Mia Martini, Matia Bazar, Umberto Tozzi y el fantástico Franco Battiato con la joya "I treni di Tozeur" que oímos en España en los 80 y que nunca cansa. Tiene difícil ganar porque la música italiana está muy circunscrita al Mediterráneo y no cala en Europa, pero nunca se sabe.

Por último, dos países con dos canciones muy distintas entre sí pero que tienen opciones: Hungría, con una canción contra el maltrato titulada "Running" y Rumanía con un dúo que repite, Paula Seling & Ovi (ya fueron terceros en 2010) y que tienen una conjunción de voces espectacular, llevando una canción muy rítmica y con toques electrónicos y discotequeros. Rumanía también lleva años "currándoselo" para ganar y podrían dar la sorpresa.

¿Mi favorita? Desde luego, ESPAÑA, pero si tuviera que elegir alguna otra me quedo con Países Bajos. Curioso que los dos países que centran este blog puedan estar compitiendo por el triunfo final. El sábado a medianoche lo sabremos... y si resulta ganador otro, pues da igual, lo importante es disfrutar de la música y de la unión de Europa a través de ella. Si gana un país que no conozco, siempre será una oportunidad para visitarlo en 2015. ¡¡SUERTE, RUTH!!