miércoles, 6 de febrero de 2013

FINLANDIA

Sería un buen destino para una escapada, pero no en estas fechas que deben estar congelados. Este país nórdico lleva varios años en boca de muchos españoles vinculados a mi sector, la educación. Parece ser que es el país del mundo con la mejor educación y así se dejó entrever en el reportaje que emitió La Sexta el pasado domingo en el retorno del transgresivo programa de Jordi Évole "Salvados". Fué líder de audiencia y tuvo a más de 4 millones de espectadores ante sus televisiones o pantallas de ordenador para verlo por Internet, como fue mi caso. El anuncio del programa fue muy divulgado en las redes sociales y enseguida se sucedieron las opiniones sobre el mismo.

Pero yo, tan crítico como de costumbre, lo vi con otros ojos. Paquito me ha recomendado que escriba las cosas buenas que tiene la educación en nuestro país, que son muchas mientras la proyectada ¿reforma? educativa del más impopular ministro del gobierno popular, el sr. Wert, no nos las hunda. Hay cosas que cambiar, por supuesto, en la educación en España, pero desde luego no como propone el ministro; sí podríamos tomar ejemplo de muchas cosas en Finlandia, pero ¡cuidado!, es un reportaje que seguro te muestra lo mejor de la educación del país, de hecho estaban en un colegio bilingüe finés-español, y supongo que no habrá muchos. Vamos poco a poco.

A todos nos dio un respingo cuando el director del colegio catalán donde empezó el programa advierte que ha visto niños buscar comida en las papeleras de su centro porque pasan HAMBRE. No había muchos casos, pero yo también estoy convencido que los hay y cada vez más. Sé que muchos niños sólo comen caliente en los comedores escolares, algunos llegan (a mí me han llegado) sin desayunar al colegio y después de la comida en el comedor ya no podemos decir qué se llevaban a la boca. Al haber recortes en las becas de comedor desde luego que creo lo de las papeleras. Sinceramente, es atroz.

Habló también de los recortes en el personal de apoyo a necesidades educativas específicas. Si de algo nos tenemos que enorgullecer en nuestro sistema educativo es de la integración en aulas ordinarias de niños con estas características. No volveré a recordar lo que yo viví con niños de estas características en mis aulas, pero SIEMPRE es positivo y de eso tienen que aprender por allá (y por aquí) arriba. He tenido alumnos con enfermedades raras, de carácter regresivo y diagnóstico fatal, se trabaja con ellos de manera coordinada entre sus tutores, los profesionales de apoyo, el Departamento de Orientación, las familias... Y de quién más se aprende en estos casos es, sin duda, de los compañeros de esos niños, que serán un modelo de solidaridad, respeto, tolerancia y ayuda al prójimo. Evidentemente, esto SÓLO SE PUEDE VER EN LA ESCUELA PÚBLICA, ya que la concertada acabaría por decirles "no" a esos alumnos, a pesar de estar financiados esos centros con el dinero que tú, yo y todos los españoles pagamos.

¡Ay, la concertada! ¿Cuándo se terminará esa desigualdad? Si de algo nos podemos quejar en España es de la existencia de estos centros, segregadores, confesionales en su mayor parte y que sólo buscan el negocio, en muchos casos saltándose la ley sin que ninguna autoridad educativa les diga nada. Por supuesto, aquí la igualdad de oportunidades no existe, por mucho que se cacaree que sí. Esto es muy sencillo: el que quiera una educación privada que la pague, ¡¡enterita!! El dinero público para la escuela pública, no para empresas ni para congregaciones religiosas. Ahí sí que hay que aprender de Finlandia: 98 % de escuela pública. Sencillo, ¿no?

Una cosa importante que no debemos olvidar al ver un programa de este tipo: el contexto. Finlandia no es España. No sólo hay diferencias geográficas, climáticas, horarias, demográficas, etc., sino también de cultura y sobre todo de mentalidad y estructura social. La escuela es un reflejo de la sociedad en la que está inmersa. Si para ellos es normal que su hijo salga del colegio, vaya solo a casa y pueda estar 2 ó 3 horas esperando al regreso de sus padres, perfecto; en España esto sería impensable. Pero eso es secundario. Lo importante son dos cosas:

- A) La implicación de las familias en el proceso educativo. No es sólo venir a las reuniones (los que vienen), firmar las notas y punto. Implicar a las familias es abrir las aulas a ellas. En el reportaje la maestra finlandesa lo explicaba muy bien: "la escuela se paga con los impuestos de todos, por lo que yo quiero ver cómo se trabaja con los niños, quiero comprobar si mis impuestos están bien invertidos". En España nos sentiríamos muy observados los docentes, pero hay que ir rompiendo poco a poco este aislamiento y que los padres entren, vean y colaboren. ¡Ojo! Pero cada uno en su sitio, la formación pedagógica la tiene el docente, no la mamá o el papá de turno que sólo va a juzgar. Además, el prestigio social que tienen los docentes es algo en lo que hay que avanzar mucho en España.

- B) La no burocratización del trabajo escolar. Hay momentos en que un maestro parece más un agente de la Administración que un profesor. Los "papeles" restan tiempo al trabajo escolar, a la creación de actividades, a la evaluación del alumnado. Yo me he preguntado en 22 años que llevo trabajando para qué se hace a veces una programación que luego NUNCA usas (y lo siento si me lee un inspector, pero es así). Somos capaces de tener las mejores programaciones para un día, una semana, un mes, un curso escolar. Llegas un día con tus actividades preparadas y al ver cómo están tus alumnos ese día tienes que cambiarlo todo, o surgen cosas en el aula que hay que aprovechar para hacer un aprendizaje significativo que seguro el niño interioriza mejor que todos los objetivos que has propuesto en tu programación.

Asignaturas pendientes en el sistema educativo español hay muchas, pero hay otras más que aprobadas. La garantía de tener un sistema de igualdad de oportunidades es casi completa (digo "casi" por lo de la concertada). Y también recalco que no es lo mismo igualdad de oportunidades que igualdad de capacidades. Cada niño aprende a su ritmo y con los apoyos necesarios si hacen falta. ¿En qué suspendemos? Por supuesto, en idiomas; en la excesiva "funcionarización" del trabajo docente, incluido  el acceso al mismo; en la formación inicial y permanente del profesorado; en la parcialización del currículo, especialmente en Secundaria (aunque no más que en Holanda, por ejemplo). Y ganamos en lo ya dicho de la integración, en lo vocacional de la profesión, en la igualdad, en la educación en valores... 

No es fácil hacer una comparación, pero hay una cosa que nunca se debería hacer por parte de los medios de comunicación: ponernos como los "malos" mientras los otros son los "buenos". España está metida en una importante crisis, pero más que económica yo la veo una crisis de valores, una crisis moral. Hay talento, hay recursos, pero no hay políticos que sepan gestionarlos adecuadamente. Cuando salen a la luz las noticias de corrupción y oyes hablar de cuentas en Suiza, de pagos en sobres con billetes de 500 euros, de amiguismos para acceder a un puesto de trabajo en tal o cual organismo público, te planteas la herencia que dejamos a nuestros hijos. Mientras no haya la conciencia social de que lo público es de todos y hay que cuidarlo y vigilarlo, no saldremos adelante. Para el que quiera hacerse rico, que se monte su negocio.

En definitiva, envidio a Finlandia en muchas cosas pero también hubo cosas que no me gustaron. Por ejemplo, el director elige en su centro a su profesorado, si le gustas adentro, si no, búscate otro centro pero, ¿quién elige al director? ¿No hay amiguismos aquí? ¿No escoges al hijo de tu amigo que acaba de terminar Magisterio? De eso no se ha hablado y me parece un paso atrás. Sólo me gustaría que, cuando se plantee una reforma educativa, se tomase en cuenta la opinión de los que estamos al pie del cañón, de los MAESTROS, porque tenemos mucho que decir, que aportar y que solucionar de este sistema educativo que tiene pequeñas fracturas fácilmente solucionables y que nos dejarán llegar al "Top 10" en pocos años. Volveremos al tema, seguro. Besos.

   


2 comentarios:

  1. Alfonso, mirate este documental sobre la educación americana:

    http://www.movie2k.to/waiting-for-superman-watch-movie-482494.html

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  2. En realidad, Madrid y Castilla y León ya están en el Top 10. A mí lo que me sorprende es eso, que unas comunidades tengan resultados muy buenos y otras estén a la cola.

    No vi el programa, que al final no es más que amarillismo barato, pero sí me he leído tropecientos artículos que han salido durante años repitiendo las mismas 2 ideas como papagayos. Y al final, lo único que saco en claro es que el modelo educativo finés solo funcionará en España cuando España sea Finlandia. No somos la misma sociedad, así que es ridículo querer el mismo modelo.

    Pero claro, es que la gente no quiere una buena educación, que sus hijos crezcan en un buen ambiente. Quieren estar en el número 1 de la lista, decir "pues yo llevo a mi hijo a la mejor escuela de la comunidad según el informe X".
    Y, siendo realistas: somos españoles. Podemos tener la mejor educación, sanidad y sistema judicial, que siempre vamos a lloriquear diciendo que somos lo peor del mundo.
    Que nadie nos quite excusas para el victimismo.

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