sábado, 31 de marzo de 2012

NATURA ARTIS MAGISTRA

Pero, ¿qué pasa? ¿Ha vuelto Alfonso a clases de latín? ¿Y dónde ha quedado su holandés? Todos tranquilos. Si alguien tiene en algún rinconcito de su cabeza aquellos "latinajos" de 2º de BUP o estudios posteriores, probablemente pueda traducir sin problemas el titular de mi entrada de hoy: "La Naturaleza es la maestra de las Artes". Este es el nombre del zoo de Amsterdam, más conocido solamente por la segunda palabra: ARTIS. Hoy hemos visitado el zoo (digo hemos porque estamos los cuatro aquí) y ha sido una preciosa experiencia, nos ha cautivado.

En pleno corazón de la ciudad y prácticamente al lado de casa tenemos uno de los zoos más bonitos de Europa y quizás del Mundo. A pesar de los precios (entre entradas y comida se nos han ido 100 euros), las 4 horas que pasamos han cundido para ver y comprobar el amor que tienen en este país por los animales, que en otras facetas de la vida a mi me parecen ya exagerados (creo que ya os comenté que existe billete de perro en los trenes). Cada pabellón está muy bien acondicionado para la vida de determinado ecosistema, con las condiciones climáticas adecuadas: puedes pasar del calor del trópico a la realidad climática holandesa en pocos minutos. Reptiles, aves, mamíferos, anfibios y peces están representados en este espacio, así como insectos y otros invertebrados, de los seis continentes del planeta (no olvidéis que la Antártida también es un continente y aquí podemos encontrar pingüinos).

Coincidía además que a la hora que fuimos estaban alimentando o limpiando los recintos de algunas especies, lo que sirvió para re-comprobar que el cuidado es exquisito. Desde un mariposario hasta la jaula de los chimpancés o el cuidado de las pezuñas de los elefantes la labor de los empleados nos pareció muy profesional. Poder sentir como una mariposa pasea por tus dedos es una experiencia única o ver cómo un bebé gorila de apenas una semana mama de su madre es fascinante.

Si recordáis, cuando me trasladé a Amsterdam coincidió con el nacimiento de Mumba, la pequeña elefanta que es la estrella del zoo. Hoy pudimos verla de cerca, muy protegida por sus papás, pero encantadora. Os dejo la mejor foto que he podido sacar de ella.


Pero hubo otra escena que también nos emocionó. En el pabellón de gorilas dos hembras acababan de tener a sus crías, una hace una semana y la otra hace un mes. Los tenían en su regazo dormidos o amamantando y la imagen de quietud y serenidad era la misma que puede sentir una hembra humana cuando tiene a sus crías. Os aseguro que el parecido era tremendamente asombroso: miradas, conducta, gestos... Así que, ¡olé por Darwin!

Leones, cebras, jirafas, marsupiales, buitres... ¡y pingüinos, como ya os he dicho! nos acompañaron a mi y al resto de visitantes en una mañana bastante fría después de los calores que hemos vivido. Como era de esperar, siempre hay la crítica. Muchos colegios llevan a los niños con un cuadernillo para investigar por el zoo y apuntar alguna cosa. Hasta ahí todo bien. Pero en esos momentos es cuando te das cuenta que la educación aquí deja mucho que desear. Había niños que andaban como salvajes, solos por el recinto y en los lugares de restauración se convertían en los amos del terreno. No fue difícil entender a una de las dependientas de uno de los restaurantes quejarse a una compañera de las respuestas que le dio una niñata ante el precio de algo que quería comprar. Imitaba la voz de la niña a la perfección y acabó su burla y su reproche con un contundente ¡¡¡Aghh, kinderen!!! En el mismo restaurante tuvimos la suerte de que nos atendiera un cocinero cubano que mientras hacía su trabajo no podía evitar comentar con nosotros su hartazgo de esta sociedad tan fría y en muchas ocasiones hipócrita, acabando su conversación con el ya clásico "estaré aquí un tiempo para hacer dinero y volver o a Cuba o a España o Italia, donde está la gente de verdad como nosotros, este no es sitio para quedarse", aunque ya llevaba aquí 7 años.

Y así, a lo tonto, ha llegado la Semana Santa. Amsterdam se llenará de turistas españoles. Sería interesante saber cuántos llegan y pensar si realmente la crisis es tan fuerte que no nos permite viajar. A la hora del Telediario oí que se esperaban 14 millones de desplazamientos estos días en España; a los pocos minutos el gobierno anuncia sus Presupuestos anunciando recortes en Exteriores, Educación, Servicios Sociales.., pero dándoles una palmadita en el hombro a los auténticos estafadores de la sociedad: "ale, que si nos das tu dinero negro sólo te ponemos un 10% de impuesto (???!!!)" Así no me extraña que Amsterdam se llene de turistas españoles, pero a algunos habría que traerlos al Artis, al recinto de los buitres

En fin, resistiremos, Wyoming ;=)



sábado, 24 de marzo de 2012

Historia en Arnhem

Para muchos oír Arnhem sería simplemente el nombre de una ciudad de los Países Bajos, capital de la provincia de Gelderland. Pero para otros Arnhem puede significar terror, horror, sangre, dolor. Esta localidad fue escenario en 1944 de la llamada "Batalla de Arnhem" en la II Guerra Mundial, en la que las tropas aliadas, preferentemente Reino Unido, Paises Bajos y Polonia querían recuperar territorio a las tropas alemanas, pero salieron mal paradas. Después del desembarco de Normandía, había que ir avanzando contra Alemania y en Arnhem existe un puente estratégico que cruza el Rhin. Sin embargo, la mala planificación aliada y la superioridad alemana hizo que esta batalla se perdiese y el resultado fue varios miles de muertos, entre ellos unos 300 civiles de la ciudad. Por lo que he leído la acción de esta batalla está desarrollada en un película llamada "Un puente lejano" que intentaré ver.

Hoy estuve en Arnhem, a una hora en tren desde Amsterdam. El casco antiguo, después de ser dañado en esa batalla, está totalmente recuperado, en algunos lugares con bastante mal gusto, por cierto. Pero toda la ciudad tiene referencias a la batalla y a pocos kilómetros del centro de la ciudad se encuentra un museo que es excepcional por lo bien estructurado que está y que cuenta el desarrollo de esa batalla que duró 9 días. El museo se llama "AIRBORNE MUSEUM" y está en Oosterbeek, un barrio residencial de la ciudad. El edificio que lo alberga fue el cuartel de las tropas aliadas, un hotel que hizo estas funciones durante los días de la batalla. La reconversión en museo es fantástica y la forma de narrar los hechos es magistral. Si algo hay que reconocer a los holandeses es su buen hacer a la hora de estructurar las secciones de un museo, de modo que lo hacen muy interactivo y no un lugar para ver y no tocar. 

La mejor parte del museo es la llamada "Airborne Experience" y ocupa el sótano del mismo. te metes literalmente en el Arnhem de aquellos días de 1944, en una zona hecha a escala real de los edificios de Arnhem medio destrozados y entre una lluvia de bombas, con tanques, ametralladoras, soldados heridos... Es espectacular.




A una distancia de unos 500 metros desde el museo se encuentra el cementerio de las tropas aliadas. Es conmovedor ver el típico cementerio "de guerra" con las lápidas iguales y todo muy cuidado y recogido en un verde campo pincelado de estelas blancas, algunas con una simple inscripción de "Soldado sin identificar. Sólo Dios lo conoce".  En definitiva, la visita a Arnhem ha merecido la pena. ¿Qué pasaría en España si alguien plantease hacer un museo de la batalla del Ebro, por ejemplo? Nos hace falta ir cerrando  heridas después de casi 80 años.

Por lo demás, el tiempo está espléndido, 18-19º en las horas centrales del día. Las terrazas plagadas de gente, pero es que apetece mucho. Y una nostálgica curiosidad. Al salir de la estación de Arnhem regresé a la Coruña de los años 70: en Arnhem hay ¡¡trolebuses!! ¡Qué recuerdos! Aquellos viajes en el 14 por la avenida de Fisterra o el 8 que subía al Ventorrillo. Estos trolebuses son más modernos, pero el peculiar "troley (¿se escribe así?) ahí está. Seguiremos informando.



domingo, 18 de marzo de 2012

108 EUROS

Fin de semana de trabajo y de museo. La verdad es que no ha estado muy bien el tiempo, pero se nota ya la claridad de los días y hay que empezar a moverse más. El viernes estuve con un alumno de Erasmus que conocí en el avión cuando vine en septiembre, un chaval de 22 años que eligió la universidad de Gröningen para hacer sus asignaturas y que el sábado tenía un examen de inglés importante en Amsterdam. Nos vimos y charlamos de todo un poco cara a cara, ya que teníamos contacto por facebook. El caso es que me sorprendió un dato que me dijo y que marca diferencias. Luís, que así se llama, estudió en la universidad de Salamanca. Su beca de Erasmus es de 108 euros, una cantidad irrisoria para un país como este. Es cantidad no es más alta porque el gobierno de la comunidad autónoma de Castilla-León (al igual que el de Galicia, como me comentó) no da ayudas para estos intercambios; sin embargo, la Junta de Andalucía sí subvenciona a las universidades de su territorio y sus alumnos disfrutan de una beca (¡atención!)... 6 VECES MAYOR, es decir, sobrepasa los 600 euros. Piensen ustedes el color político de las susodichas comunidades autónomas y saquen conclusiones.

Él, a pesar de todo, estaba encantado con la experiencia. Pasar un año en otro país que no es el tuyo y en un entorno de individuos en la misma situación que tú es, como definió muy bien él, una "burbuja". Vive en una residencia de estudiantes en la que tiene un espacio propio de 9m2, el resto servicios comunes; estudia en inglés sus asignaturas y se preocupa por mejorar su competencia lingüística en ese idioma con un examen de una institución británica que le cuesta 186 €; viaja cuando puede por Europa en vuelos low-cost (ha estudiado Historia y estos días ha estado en los escenarios del desembarco de Normandía, ha hecho una escapada a Tallinn por 20 € ...), en definitiva, un chaval con las ideas claras respecto a su formación académica y, como dirían los políticos, el futuro: pues precisamente por eso escribo esto, esos políticos invierten en él 108 euros al mes para pasar 10 meses formándose en otro país. Conclusión: una vez más comprobamos que, a nivel educativo, tenemos unos políticos gilipollas, al menos en algunas comunidades autónomas.

También el viernes acudimos a la presentación del primer disco de una cantante española afincada en Amsterdam, compañera mía en los cursos de holandés. Rakel Salazar nos deleitó con su voz de jazz en una noche un tanto fría pero entre mojitos, cerveza y la buena compañía de varios conocidos y compañeras pasamos un par de horas agradables.

Ayer sábado tocó trabajar en casa en cosas de la ALCE, pero hoy domingo las mismas compañeras y yo fuimos a visitar un interesante museo que está muy cerca de casa, el Scheepvaart Museum, (Museo Marítimo Nacional) que se ha reinaugurado hace poco tiempo y que ha sido fantástico por la exposición de sus contenidos, muy interactivo y adaptado a todas las edades. Otro de esos sitios más que recomendable para aquellos que quieran visitar la ciudad.

Poco más hay que contar. He sacado los billetes para abril buscando alternativas a los precios desorbitados de las aerolíneas, así que he tenido que recurrir a la que menos me gusta, Ryanair, para ahorrarme 100 euros y saliendo desde Eindhoven porque en esas fechas parece que toda Holanda quiere viajar y por menos de 500 euros era prácticamente imposible viajar a Coruña en las fechas que yo quiero. Respecto a este tema, ayer se publicaba en "La Voz de Galicia" una nueva noticia sobre los aeropuertos gallegos. Al momento reaccioné por lo poco objetiva que era la información y hoy ha salido publicada en la edición impresa, me lo ha contado mi padre, aunque un poco más resumida. El año pasado por estas fechas ya estaban a la venta los vuelos del enlace directo Amsterdam-A Coruña que empezaban con el horario de verano; este año tenemos que esperar a junio y de ahí mi protesta. Intereses económicos ocultos para favorecer a Lavacolla y por ahí no vamos bien. No se trata de A Coruña CONTRA Santiago, sino de A Coruña CON Santiago en beneficio de toda Galicia. A ver si toman nota

¡¡Buena semana a todos!!



viernes, 16 de marzo de 2012

EL DESTINO

Hay días que las cosas salen como no esperas. El pasado martes fue "martes y 13" y aunque no crea demasiado en esas cosas, siempre está ahí la intriga de lo que pueda pasar. Lo curioso es que a mi me vinieron los contratiempos ayer, nada grave por otra parte.

La rutina que tengo organizada va  condicionada por mi trabajo y el transporte, en la mayoría del tiempo en Holanda. Los jueves voy a Heemskerk, cojo el tren de vuelta a las 20'13 en Uitgeest, llegando normalmente a las 9 de la noche a casa. Ayer la NS (Nederlandse Spoorwegen) me regaló una excursión por tierras holandesas a esa hora debido a un "stroomstoring" (problema de potencia eléctrica): sentadito como estaba ya en mi tren haciendo el sudoku reglamentario y escuchando música en mi iPod Shuffle, se acerca el revisor del tren, muy amable por cierto, avisando a todos los pasajeros que había un problema y que habría un retraso de 15 minutos. Después de un tiempo vuelve y nos dice que podemos ir a Alkmaar (más al norte, es decir, en sentido contrario!!!!) y coger un Intercity que circulará hasta Amsterdam. Bien, el tren sale hacia el norte y en la primera parada, Castricum (qué bello nombre para un gallego), nos bajan a todos, revisor incluido, y nos dicen que esperemos ahí el Intercity, en 10 minutos llega. Estamos ya en las 20'53. Llega el tren y circula por otro itinerario, por Beverwijk y Haarlem, sin parar. Lo que más gracia me hace es ver a los pasajeros de esas estaciones con cara de sorpresa al ver que el tren no para: no es su ruta.

Total, que llegamos a Amsterdam sobre las 21'30, bici a casa y a las 21'45 llego. Pero no acaban ahí las sorpresas. Entro con mi bici para dejarla en el sótano y... ¡¡el ascensor no funciona!! Los recuerdos del 23 de junio de 2011 cuando hice la mudanza vinieron a mi mente: todos los muebles en el portal del edificio esperando el arreglo del mismo. Así que nada, hoy "Babieca" (bonito nombre para la bici, se admiten sugerencias para un nuevo bautizo) ha dormido fuera, al raso, y a mi me tocó subir 8 pisos por las escaleras empinadas típicas de cualquier edificio holandés. Pero siempre con una sonrisa, qué remedio, porque aquí nadie protestó por el retraso en el tren y la amabilidad del revisor lo compensó todo... por lo menos al resto de los holandeses que iban en el tren.

Si hubiese ocurrido un día de frío, lluvia o nieve los ánimos supongo que serían otros. Ayer la temperatura era totalmente primaveral, hubo un auténtico día de sol. Hoy está con niebla, pero promete un buen fin de semana, por lo menos tendremos algo distinto. Una compañera de mi curso de holandés, también española, es cantante y nos ha invitado a la presentación de su primer CD, "Confessions in Amsterdam" a partir de las 10 de la noche en un pub de Rembrandtplein. Por si alguna vez en el futuro esta chica llega lejos acordaos del nombre de Rakel Salazar, os contaré a ver qué tal.

Y ahora a comprar, que estoy sin reservas en casa. Esperemos que funcione el ascensor porque subir 8 pisos con bolsas no es plato agradable. Pero siempre con una sonrisa... :)


viernes, 9 de marzo de 2012

MAC

No he cambiado mi apellido por uno irlandés. Pero sí ha habido un cambio. En este mundo tecnológico que vivimos decidir entre dos opciones no siempre es fácil y romper con lo anterior para empezar algo nuevo lleva su tiempo: me he comprado un iMac, por lo que Microsoft y Windows desaparecerán de mi vida poco a poco (espero).

Seguro que mi seguidor Paquito estará feliz (¡¡¡ayúdame!!!) porque he salido del "lado oscuro". El caso es que en tres días que llevo con mi nuevo inquilino en casa ya noto mejorías. Mucha gente me había hablado de que no hay color entre un sistema y otro, pero la adaptación cuesta. Además mis conocimientos de redes y todo lo que implica cables (o sin cables) me vuelve loco. En mi casa hay un router wi-fi pero soy incapaz de conectar correctamente los equipos, además de haber un modem para el cable de la conexión a Internet y el aparato de la televisión digital con Ethernet. Vamos, que para entender todo casi hay que hacer un máster. Por el momento tengo los dos ordenadores conectados a Internet y ahora poco a poco tengo que ir transfiriendo archivos, pero el antiguo no tiene wi-fi, así que no puedo usar el proceso de migración que ofrece Apple.

La compañía de la manzana me atendió de manera excelente por teléfono, una comercial que se preocupó para que mi ordenador llegase a Amsterdam con teclado español. Es más, me han regalado los dos teclados, así que tengo un teclado inglés NUEVO que vendo al mejor postor. Además, para el que no lo sepa, siempre hay un descuento para profesores y estudiantes, así que la idea no está mal. Y ahorras tengo un soporte on-line para las dudas que pueda tener durante tres meses.

La cuestión es que ahora hago dos cosas a la vez (o tres). El correo lo descargo en el antiguo y contesto mientras escribo, por ejemplo, este post. Escucho música desde uno mientras traspaso archivos, al mismo tiempo que hago la comida o chateo por Skype y veo la televisión española. A veces pienso si no estaré demasiado conectado a todo.

Os iré contando esta nueva vida en el universo Apple, pero promete, igual que cuando me vine a Holanda. Por aquí las cosas siguen su curso normal, acercándonos ya a la ansiada primavera, esperando visitas y con mucho trabajo, no sólo las clases, la burocracia en un programa como el de las ALCE es inmensa y a mi modo de ver muchas veces cuestionable. Si de verdad simplificáramos las cosas en los procedimientos administrativos de España también habría ahorro porque es para volverse loco en determinados supuestos, sobre todo a nivel económico, que te piden justificación de gastos de miles maneras y muy ilógicas, en un mundo en el que ya prácticamente todo se puede hacer por Internet: pagos a cuentas, ingresos, compras. El ejemplo claro es la compra de mi iMac, no he visto a ninguna persona física y en cuatro o cinco días mi ordenador estaba en casa y el cargo en mi cuenta bancaria: chapó.



martes, 6 de marzo de 2012

LOS BALCANES

Aquellos que me conocen un poco saben que en los últimos años mi afición por la lectura ha aumentado. Y como siempre he estado pendiente de la geografía y de la historia reciente, siendo las dos materias de mis preferidas desde que era un crío, hay una zona de Europa que me apasiona especialmente y que anhelo visitar: los Balcanes, especialmente el territorio que comprendía la antigua Yugoslavia.

No voy ahora a dar una lección geográfica e histórica de esta zona tan conflictiva a lo largo del tiempo, pero que poco a poco va saliendo de ese pasado de terror y guerra de finales del s.XX para irse integrando también pasito a pasito en nuestra Unión Europea. Eslovenia pertenece ya desde 2004 y el año que viene Croacia formará parte de la "Europa de los 28" mientras Serbia hace pocos días ha conseguido ya también un calendario para su adhesión. Si te adentras un poco e investigas es realmente apasionante su transcurrir histórico al mismo tiempo que cruel y trágico por los conflictos que ocurrieron en esta región del corazón de Europa; particularmente me empezó a interesar poco tiempo después de morir el dictador Tito, en 1980. Durante esa década Yugoslavia empezaba a aparecer en las noticias con mucha más frecuencia. En 1984 Sarajevo fue la sede de los Juegos Olímpicos de Invierno y 10 años más tarde su estadio olímpico era un gran cementerio lleno de muertos en la guerra. Por otra parte, a medida que yo iba creciendo al dar temas de historia en el instituto siempre aparecían los Balcanes como un auténtico avispero. En 1914 esa misma ciudad fue el lugar donde el asesinato del heredero del imperio austro-húngaro fue la chispa que originó la I Guerra Mundial. Tal vez todo eso influyó en mis ganas de saber más. Con las imágenes de la guerra de Bosnia entre 1992 y 1995, que revolvía las conciencias de todos, mi interés aumentó y hoy leo con frecuencia libros sobre la zona y sus conflictos, dus gentes, su historia... sobre todo  para darme cuenta de que lo que nos contaron los medios, como suele ser habitual, estaba muy tergiversado.

El caso es que en estos días de vacaciones me leí un interesante libro muy poco conocido en España, a pesar de ser su autor valenciano. Se trata de "Cita en Sarajevo", de Francesc Bayarri. Cuenta la historia de un asesinato en la España franquista ocurrido en Carcaixent en el cual la víctima fue un ex-militar croata de la II Guerra Mundial, aliado de Hitler y con un historial de más de medio millón de muertos a su espalda en el campo de concentración de Jasenovac, Maks Luburic. El autor del libro buscó al supuesto asesino de este elemento y lo encontró en Sarajevo después de 34 años, Ilija Stanic, lo entrevistó y nos cuenta cómo huyó de Carcaixent después del crimen y cómo fue recibido como un héroe en la Yugoslavia de Tito siendo también un nacionalista croata, viviendo totalmente en el anonimato en su país y sin haber nunca sido juzgado en España. Este libro se suma a los muchos que ya he leído con los Balcanes como eje principal y que me serían difícil nombrar todos aquí. Pero si alguien desea conocer realmente la historia de Europa, no puede prescindir de saber y conocer lo que realmente pasó en esta región y cómo ha influído en la política posterior común a todos nosotros. Para ir abriendo boca sabed que Croacia (católica) fue siempre un gran aliado de Alemania y Serbia (ortodoxa) de Rusia, así que vayan haciendo sus teorías sobre el equilibrio de fuerzas. Y en el medio de ambos países, nada más y nada menos que Bosnia-Herzegovina, con amplia población musulmana que fue quién más sufrió las consecuencias de la guerra de los 90.

Aquella Yugoslavia de Tito no alineada, separada del extremismo de la URSS y buscando siempre su aproximación a Occidente (curiosamente era el único país de la Europa comunista que, por ejemplo, participaba en el Festival de Eurovisión, del que sabéis que también soy un gran seguidor, incluso se dice que el triunfo de Yugoslavia en el festival de 1989 aceleró la caída del Muro de Berlín y esa victoria se esperaba fuese un freno a lo que estaba por venir y que fue inevitable, la desmembración del país), acabó a su muerte convertida en el "puzzle" de Europa y el pastel que todos querían, pero con miles de muertos, familias rotas y separadas y heridas de difícil cicatrización que aún hoy están ahí. Yo no oculto que recuerdo perfectamente que lloraba al ver en la televisión los muertos civiles en el mercado de Sarajevo tras el bombardeo serbio, los cuerpos esqueléticos de los campos de concentración como los de la Alemania nazi, la voladura del puente de Mostar a manos croatas, la matanza de Srebrenica... He visto películas sobre el tema ("Grbavica", "Las flores de Harrison"...), he escuchado música (desde luego los intérpretes de Eurovisión han sido una base para profundizar más y os aseguro que su folklore y sus ritmos y melodías son preciosos), os puedo citar nombres como Vukovar, Banja Luka, Gorazde, Mitrovica que seguro que a vosotros no os dicen nada pero que son imprescidibles para saber más. Podría hablar horas porque me apasiona el tema y uno de mis deseos es poder visitar la zona pronto. Me han hablado amigos que han estado en Croacia y Bosnia (Dubrovnik, Sarajevo, Mostar, Split...) y espero poder pisar y ver "in situ" los escenarios que tantas veces leí, con el "Diario de Zlata" (la llamada "Ana Frank" de Sarajevo), con "Si un árbol cae" de Isabel Núñez, con "Como si yo no estuviera" de Slavenka Drakulic y ahora con "Cita en Sarajevo".

Y que nadie olvide una premisa necesaria para tener en cuenta en la vida: hay que conocer el pasado para que en el futuro no repitamos los mismos errores. Por desgracia, el ser humano no aprende y no podemos predecir lo que ocurrirá en 5 ó 10 años, pero las guerras siguen en el mundo, aunque espero que ya definitivamente fuera de los Balcanes.

Sólo una cosa más: hay gente que opina que hacerme un regalo por mi cumpleaños no es tarea fácil. No pido un viaje a Sarajevo o Dubrovnik, pero libros sobre el tema hay muchos y probablemente me quede mucho por leer y conocer sobre esa región. Ahí queda.





viernes, 2 de marzo de 2012

PIZZAS A UN EURO

Hay momentos en que España da una imagen de frikismo total. Existen múltiples ejemplos. Poner algún canal de televisión a una determinada hora sería el ejemplo más claro. El problema es que luego las grandes mentes de este país, algunas más frikies que los propios programas, alzan sus voces reclamando al canal en cuestión que dejen de emitir tal o cual programa, sumándose también sin quererlo (o queriendo) a esa corriente frikie e incluso casposa y rancia.

El caso es que nunca miramos hacia nuestro propio ombligo y nos autoevaluamos. Si hay un programa frikie, es porque hay una audiencia frikie que necesita de esa carnaza para autoafirmarse y seguir viviendo en este país tan peculiar. El 29 de febrero yo también me vi metido en ese universo frikie sin tener el más mínimo interés.

El hecho fue el siguiente: la empresa Telepizza lanzó una oferta de pizzas a un euro durante ese día, no sé si por ser el famoso día "bisiesto" o por marketing. El caso es que allí me manda mi familia a encargar dos pizzas. La cola salía del establecimiento y conseguir las pizzas se convirtió en una cuestión digna de grabar, de hecho la gente sacaba fotos. Imágenes de familias enteras con miles de niños de toda clase social comiendo dentro del establecimiento ante una pila de cajas vacías (tranquilamente, 10) y gente saliendo del establecimiento con torres de 6, 7, 10, 12 cajas de pizzas era la imagen habitual entre las 7 y las 8 y media de la tarde. Se llamaba por teléfono a tíos, primos y demás familia para beneficiarse de la oferta que incluía una pizza pequeña de un solo ingrediente a escoger entre champiñones, jamón york o bacon, como véis todo muy saludable.

Os aseguro que me sentí mal al verme partícipe de tal contubernio. Pero es que las imágenes que veía son como  para echarse a temblar. Con este personal ni valores, ni fomento de la alimentación saludable, ni crisis, ni nada. La oferta parece ser que había empezado a las 12 del mediodía; a mi me tocó el ticket 501, así que id haciendo cuentas a una media de 3 pizzas por persona como mínimo. Yo me fui y aún la cola aumentaba, cruzando ya la calle. Viendo cosas así, entiendo que "Sálvame" sea un programa de éxito total, son los mismos parámetros.

Pero es que también por fe. Acabo de ver en el informativo que ha habido gente que ha estado 10 días durmiendo a la intemperie en Madrid para poder entrar hoy los primeros a la iglesia de Jesús de Medinaceli para besarle los pies al santo y pedirle que se cumpla su deseo (??!!) Sí, sí. ¡¡¡10 días!!! Con este "club de fans", ¿cómo vamos a obligar a la Iglesia a que paguen el IBI de todos los inmuebles que tienen en nuestro país? Se nos echan encima cuando no puedan estar a las puertas de un templo y cobrándoles por entrar para subvencionar el recibo anual del impuesto. Seguimos como en aquellos tiempos de fomento del turismo: "Spain is different".