miércoles, 26 de septiembre de 2012

25 de septiembre

Me cuesta mucho ver las imágenes de las manifestaciones de ayer en Madrid delante del Congreso de los Diputados. Ver cómo gente pacífica, de todas las edades se manifiestan porque están (estamos) hartos de oir mentiras, de ver cómo sigue subiendo el paro, de que los jóvenes formados de España emigren porque no hay una oportunidad para ellos, de que nadie sabe cómo sacarnos de esta crisis... Pero más me indigna que el Gobierno de España piense que son personas anti-sistema y delincuentes, cuando había jóvenes, gente de mediana edad y ancianos. Rajoy más preocupado por la foto con Obama que por los problemas del país, que no tiene ni idea de cómo solucionar, igual que la mayoría de los ministros. Recortes y más recortes, rescates autonómicos, dinero a la banca... y la gente que no tiene derecho ni a prestación de desempleo, ni social y ahora ya ni sanitaria.

La sensación que transmiten las imágenes y noticias que llegan de España es de tener un país al borde del estallido total; y la imagen que hay de España por Europa es exactamente esa, que es cuestión de semanas o días. En todos los aspectos de la vida se palpa el pesimismo: en sanidad, en educación, en servicios sociales, en pensiones. Por eso el 25 de septiembre creo que seré el inicio de un nuevo movimiento de protesta que tiene que cuajar de una vez por todas. Me entristece ver a los policías pegando a la gente como si viviésemos en un país de la "primavera árabe", como si la gente estuviese pidiendo libertad o que caiga un dictador. Pero al mismo tiempo reflexionas sobre el tipo de democracia que tenemos y que la realidad nos dice que no es la ideal, que esta clase política no es la que queremos y que no vemos alternativas. En un mes hay elecciones en Galicia y prácticamente podríamos pasar sin hacerlas, ya sabemos los resultados de antemano.

¿Nos merecemos esto como ciudadanos? ¿Hacia dónde vamos? Pesimismo, desesperación, angustia... no son palabras que levanten el ánimo de la gente. Pero desde luego los movimientos como el 25-S deben seguir, debemos seguir protestando en la calle, en las redes sociales, en donde sea. Hay que hacerse oir por todos los lados para que los políticos reaccionen y se dejen de tonterías y recortes innecesarios. Hoy tres países europeos, Holanda, Alemania y Finlandia han advertido a España que el rescate no es la solución. Pero mientras la gente se va, la gente joven, y ese sentimiento de desesperación está generando unos comportamientos en las personas que nos van a pasar factura en el futuro.

Yo sólo espero que se empiece a ver una luz al final de túnel, que el camino tortuoso parece no acabar nunca y que los ciudadanos reaccionemos definitivamente. Pero claro, no somos Islandia, que con 300000 habitantes dejó las cosas claras a su clase política y a sus bancos. Somos un país de 47 millones de habitantes, con muchas culturas diferentes, muchas veces poco solidarios entre nosotros mismos. Confío en que surja alguien o algo que una (que no sea un iluminado, claro) y estoy convencido de que se logrará y mejoraremos, lentamente, pero saldremos adelante.



4 comentarios:

  1. Yo me he pasado dos tardes pegada a la web de el país donde se retrasmitía en directo las manifestaciones en neptuno. Y me he tragado todo video que circula por FB y demás redes sociales. Se me enconje el alma...

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola,

      Sin restar un ápice del valor del post, debemos puntualizar una serie de cosas...

      1. Manifestarse: bien, soy partidario... Ahora (reflexión en voz alta): basta ya de buscar culpables (nos pasamos la vida buscando a quien culpar en lugar de buscar soluciones).

      2. Problema de las manifas: en estas manifas el 99% del personal va en plan pacífico y a ejercer su derecho democrático a discrepar de forma pública contra tal o cual cosa...

      PEEEEEEERO... Como en todo, siempre hay cuatro que van a liarla (260 kilos de piedras recogidos por los servicios de limpieza) y, cuando eso sucede, aparecen los anti-disturbios...

      Sin justificar acciones puntuales (lo de entrar al Metro es de flipar) yo pregunto: ¿Me pueden Vds. explicar cómo controlar a una masa de miles de personas que, de pronto, puede perder los papeles?

      Ejemplo: que esas 30.000 personas empiecen a avanzar en una sola dirección (sin hacer nada salvo caminar)... ¿Cómo se contiene algo así? Pregunto).

      Es desafortunado que en estas cosas aparezcan los cuatro desgraciados de turno a liarla: desafortunadamente controlar a miles de personas en una avalancha no es fácil, porque las autoridades deben, a su vez, controlar por el propio bienestar de las personas que allí se congregan (me ha pasado una vez, caminando al lado del Bernabeu, una carga policial contra una masa de borregos futboleros: no me pasó nada, pero desde ese día el fútbol dejó de gustarme para siempre).

      Si alguien ha hecho mal algo (abuso de autoridad o cosas así, como el famoso video de los policías durante la visita del Papa en Madrid buscando a una chiquilla para darle) que pague, pero antes de liarnos a defender cualquier postura, creo que es necesario pensar qué está pasando, porqué está pasando y cómo entender ambos factores (efectivamente, yo te puedo enseñar una foto de una persona sangrando y clamar brutalidad policial, pero quizás debería enseñarte que, a lo mejor, esa misma persona estaba lanzando piedras contra la autoridad 10 segundos antes).

      Perspectiva... No me gustan estos shows lamentables: hay cuatro desgraciados que van a liarla y, contra esos, yo no tengo clemencia (porque deslegimitan la reivindicación de aquellos que se manifiestan de forma pacífica).

      Un saludo,

      Paquito.

      Eliminar
  2. Ola rapas! aínda que non escriba, sigo o teu blogue. Hoxe prefiro non dar opinións, son de proceso lento e teño que dixerir o que está pasando. Só unha pequena reflexión esto parece que xa se viviu, a información do que pasa neste Estado semella que se ve máis clara fóra que aquí, imos ter que volver á radio pirenaica.
    Coidate moito, pero moito, moito, porque estaremos lonxe pero só xeográficamente.
    Paz.

    ResponderEliminar
  3. Paquito no te falta razón, pero hay cada caso que clama al cielo (http://teclista.tumblr.com/post/32365932243/cuantos-videos-hacen-falta-para-que-el-poli-de-la), y lo peor de todo es que se criminalice y casi ridiculice a unos ciudadanos que no se resignan a aceptar la que está cayendo.

    No quiero que esto parezca una crítica sólo al partido del gobierno (el problema en mi opinión es sistémico), pero que encima salga el tío éste fumándose un puro en la gran manzana y dia que la gente mejor en su casita no sea que nos saquen en el NY Times... eso también me parece insultar a la gente y por qué no decirlo, generar violencia.

    A mí lo que me preocupa, aunque en realidad más que una preocupación es una constatación, es el clima político y social de enfrentamiento que existe desde los últimos ¿10-12? años en España. (Aunque tal vez sea parte de eso que llaman nuestra ¨idiosincrasia¨ y con breves paréntesis, ha sido la constante de nuestra historia desde hace siglos. (Ahora me viene a la cabeza cierto cuadro de Goya... http://commons.wikimedia.org/wiki/File:Ri%C3%B1a_a_garrotazos.jpg?uselang=es)

    Y es que al PP no le ha interesado desvincularse del franquismo sociológico que a mi juicio impera cada vez más en nuestro país (Intereconomía, La Razón,...), y me gustaría que pudiera existir un partido de centro-derecha que no se echara al monte a romper España en cuatro por un puñado de votos.

    En mi humilde opinión, todos los partidos han usado temas como los recortes sociales, el debate territorial o incluso el terrorismo de una manera partidista y demagógica que repugna.

    El sentido común brilla por su ausencia y no digamos un mínimo de consenso o de diálogo y entendimiento. Bueno, si que existe un cierto consenso en no tocar los privilegios de cierta casta, el modelo de administración o una ley electoral que asegure una mayor calidad democrática (Ej. listas abiertas o que 1 voto valga lo mismo en cualquier circunscripción electoral,...)

    A veces dan ganas de borrarse, de mirar a otro lado, de desconectar, pero estas cosas (al menos a mí) duelen mucho más estándo lejos.

    ResponderEliminar